Al incidir el sonido sobre las supercies rígidas (paredes o techo) se originan reexiones, creando de esta manera dos zonas denidas del campo acústico, una zona de campo libre que es determinado por la energía sonora directa radiada por la fuente y un campo reverbera determinado por el sonido directo y las sucesivas reexiones. Los materiales acústicos (espumas sintéticas, polieter o poliéster), tienen la particularidad de generar energía cinética y calórica, a partir de la energía sonora debido a que esta comprime su supercie y trabaja como si fuera un resorte. En todos los materiales que ofrecen un aspecto poroso, cuando incide una onda sonora, ésta tratará de penetrar el material por entre sus intersticios de manera tal, que el movimiento molecular que constituye la energía sonora incidente, hará mover las paredes de los poros,transformando parte de la energía sonora en energía cinética, a su vez el aire existente dentro de los poros también será obligado a moverse, produciéndose otro gasto de energía que se transformará en energía calórica. La combustión de éste material produce gases tóxico